Martini

Martini

Aprende a hacer un Martini como debe ser.

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Consejos

Hasta la gente que no bebe sabe que existe el Martini. Sin embargo, en mi experiencia como bartender no vi que la gente pidiera otro trago tan mal como piden el Martini. Sí, al cliente hay que darle lo que pide, pero cuando te piden un Martini con vodka y sin vermú (me ha pasado) entonces no están pidiendo otra cosa que vodka con aceitunas. A continuación, además de la receta, daré algunos consejos para que sepas hacer, pedir y beber un verdadero Martini.

¿Ginebra o vodka?

El Martini clásico es con ginebra y punto. Si quieres vodka con vermú no hay problema, también es rico, pero debes especificar que quieres un Martini de vodka o un Vodkatini.

Sin vermú

El Martini debe llevar vermú seco, de lo contrario no es un Martini. La cantidad que se le echa es cuestión de debate. Para mucha gente sólo debe llevar unas gotas. Para mí debe llevar un poco más, ya que un Martini con poquísimo vermú se conoce como seco o dry. Para mí el balance perfecto es la mitad de la cantidad de ginebra. Experimenta en tu casa para ver cómo te gusta más.

Shaken, not stirred

Por culpa de James Bond mucha gente cree que los Martinis se shakean (agitan) en la coctelera. Sin embargo, si se siguen las reglas de la coctelería, al ser un trago compuesto en su totalidad por ingredienes alcohólicos, la manera correcta de preparlo debe ser removiéndolo, o como se dice en inglés, stirred. Ahora bien, la mejor parte de las reglas es romperlas. Yo prefiero removerlo, pero si lo quieres como le gustan a James Bond, no hay problema. Por cierto, James Bond bebe Martinis de vodka. En mi opinión, no es más que una de muchas personas que no sabe pedir Martinis.

Aceitunas

Puede ser que mi parte favorita del Martini sean las aceitunas y creo que para la mayoría de las personas, al oir la palabra coctel, lo que viene a la mente es la imagen de un Martini con aceitunas. Sin embargo también es habitual decorar el Martini con un pedazo de cáscara de limón amarillo. Mi manera favorita de prepararlo es usar la cáscara para exprimirla sobre el trago, descartarla y decorar sólo con las aceitunas. ¿Cuántas? No sé bien por qué, pero la regla es que se sirva un número impar de aceitunas. Si tienes aceitunas grandes sirve con una, si tienes aceitunas medianas o pequeñas sirve con tres. Es preferible usar aceitunas verdes de buena calidad y que tengan hueso (semilla). No recomiendo que uses aceitunas negras ni rellenas de queso, anchoas o cosas así, pero si es lo que prefieres no hay problema. Mis preferidas son las aceitunas de Castelvetrano.

Hay una variación bastante popular del Martini llamada dirty. Esto es cuando se añade un poco del jugo de las aceitunas al trago.

Quizá hayas visto un Martini con cebollitas de coctel. Se trata de un trago llamado Gibson y no es otra cosa que un Martini decorado con cebollas en lugar de aceitunas.

¡Ahora que está todo claro me parece que es hora de hacer un Martini!

Ingredientes

  • 2 onzas/60 mililitros de ginebra
  • 1 onza/30 mililitros de vermú seco
  • 1 pedazo de cáscara de limón amarillo
  • 1 o 3 aceitunas verdes, para decorar

Procedimiento

Enfría una copa de coctel.

Atraviesa las aceitunas con un palillo de dientes.

Pon la ginebra y el vermú seco en un recipiente con hielo y remueve con una cuchara hasta enfriar bien.

Sirve sin el hielo en la copa de coctel fría.

Exprime la cáscara de limón sobre el trago para soltar los aceites y descarta.

Decora con las aceitunas.