Consejos
Aunque las papas ‘wedge’ son más saludables que la papa frita tradicional, al menos para mí son igual de ricas. Requieren un poco más de trabajo, pero yo prefiero pasar ese trabajo a estar llenando una sartén de aceite que tengo que guardar o botar luego.
Las papas rojas son mis favoritas para esta receta. Procura que sean medianas para que te queden del tamaño ideal.
Estas papas son ricas cuando están recién hechas, pero una vez las hiervas las puedes guardar en la nevera para terminar de dorarlas en otro momento. ¿Las quieres para el desayuno? Hiérvelas el día antes y por la mañana es cuestión de tirarlas a la plancha o al horno.
Mi manera favorita de sazonarlas es con sal gruesa, pimienta y pimentón dulce, pero le puedes agregar lo que quieras. Yerbitas secas, queso parmesano, aceite de trufas, ¡usa tu creatividad!
Si las vas a hacer al horno recuerda que cada horno es distinto y puede tomar una cantidad de tiempo distinta a la que dice la receta.
Ingredientes
- Papas
- Sal
Procedimiento
Corta las papas en dos a lo largo.
Corta cada mitad en dos, también a lo largo.
Corta cada pedazo en dos (sí, a lo largo), asegurándote de que estén lo más parejos posible.
Una vez hayas cortado todas las papas ponlas en una olla y cúbrelas con agua.
Ponle un poco de sal al agua y lleva al hervor.
Hierve durante 4 minutos y retira las papas del agua.
Para hacer las papas a la plancha
Calienta una plancha o sartén y agrega aceite de oliva.
Agrega las papas y cocina por un lado hasta que se hayan dorado a gusto.
Voltéalas y dóralas por el otro lado. Puede ser que tengas que echar más aceite a la plancha cuando las voltees.
Una vez estén todas doradas por ambos lados retira del fuego y sazona a gusto.
Para hacer las papas al horno
Caliente el horno a 425° grados Fahrenheit.
Pon las papas en una placa para hornear y asegúrate de que tengan aceite de oliva por ambos lados.
Cocina por un lado durante aproximadamente 7 minutos. Voltéalas y cocina 7 minutos más.
Retira del horno y sazona a gusto.